24 de septiembre de 2008


PLATERO Y YO



Platero es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de algodón, que no lleva huesos. Sólo los espejos de azabache de sus ojos son duros cual dos escarabajos de cristal negro.


Lo dejo suelto, y se va al prado, y acaricia tibiamente con su hocico, rozándolas apenas, las florecillas rosas, celestes y gualdas... Lo llamo dulcemente: ¿Platero? y viene a mí con un trotecillo alegre que parece que se ríe en no sé qué cascabeleo ideal...


Come cuanto le doy. Le gustan las naranjas mandarinas, las uvas moscateles, todas de ámbar; los higos morados, con su cristalina gotita de miel...


Es tierno y mimoso igual que un niño, que una niña...; pero fuerte y seco por dentro como de piedra. Cuando paso sobre él, los domingos, por las últimas callejas del pueblo, los hombres del campo, vestidos de limpio y despaciosos, se quedan mirándolo: -Tien’ asero...


Tiene acero. Acero y plata de luna, al mismo tiempo.



2 comentarios:

adi dijo...

ke triste,no me e leido ningun libro,jiji.esque no soy mucho de leer,siempre empiezo pero nunca los acabo,a ver si con tu blog me intereso por algun libro.aunque primero va el niño de pijama de rayas que lo tengo aparcado y ya que han sacado la peli...jeje
mañana no voy,asique el mares nos vemos.
por cierto,fui ste verano a suecia,recomiendo el viaje,es muy bonito,tambien estuve en noruega...jii

Neraka dijo...

Nunca he leído Platero y yo. Como no me lo mandaron en el colegio (y sí Lazarillo de Tormes, que crueldad, jeje). Pero creo que anda por casa de mis aitas, que a mis hermanos sí que les hicieron leerlo. Quizás algún día me anime a descubrirlo...

Pon algún día algo del Principito y si lo tienes me lo tienes que prestar, que lo tuve que devolver justo antes del final y El principito y yo tenemos una historia especial...

Por cierto, ¿has leído El caballero de la armadura oxidada? Mezcla de cuento y autoayuda...

Hasta mañana, espero. Voy al médico luego a ver qué me dice